Solo otra historia de amor.
-¿Te beso?- pregunto con lo ojos cerrados -No aun no- respondí observando sus labios húmedos y rojos. -¿Entonces cuando?- refunfuño frunciendo el ceño. Tome su mano, ella mordió su labio, igual que siempre, apretó la mano que estaba sosteniendo y sonrió. Di un paso mas cerca al borde, aun sin soltarla y dije, casi en susurro -Aun no-. Vi el fondo del abismo, tan profundo, tan infinito, cerré los ojos y aferrándola a mi pecho salte, saltamos, el viento movía su pelo crespo en todas direcciones, ella continuaba con los ojos cerrados, yo solo la veía. Como pude, acerque mis labios a los suyos, la bese, sonrió, sonrió como nunca y faltando solo unos metros para el suelo le dije -Te am…-.